Refrigeración neumática como solución industrial
El tubo VORTEX EXAIR es una solución confiable y libre de mantenimiento, para los problemas de refrigeración industrial, usa un suministro común de aire comprimido como fuente de alimentación, los tubos Vortex generan dos corrientes de aire, una caliente y otra fría, sin partes móviles, las temperaturas, los caudales y la refrigeración pueden ajustarse en una amplia variedad de rangos por medio de la válvula de control.
Para refrigerar herramientas a partir de aire comprimido, el tubo es de acero INOX, resistente a la corrosión y a la oxidación, su peso es ligero y su tamaño reducido, lo que garantiza que los tubos vortex de EXAIR funcionarán por muchos años en forma confiable y sin necesidad de mantenimiento.
Conseguiremos bajar 45ºC desde la temperatura inicial hasta final. Tendremos en cuenta el tamaño a enfriar, las piezas tendrán que estar fijas.
Características del tubo VORTEX EXAIR
- Temperaturas de -46ºC a +127ºC
- Caudales de 1 a 150 SCFM
- Temperaturas y caudales ajustables
Aplicaciones de la refrigeración neumática
Enfriador de herramienta: Con los cuerpos del vortex, ensamblamos una base imantada, con un grado de protección IP y un silenciador en la salida del aire. Versátil para realizar enfriado en diferentes puntos.
- Enfriado de brocas.
- Refrigeración de perfiles PVC.
- Enfriado de sierras.
- Enfriado termosellados.
- Refrigeración de frenos.
Enfriador cuadros eléctricos: Con los cuerpos del vortex montamos un grado de protección IP y en la salida del aire mediante una rosca de 3/4” un adaptador directo al cuadro eléctrico. Tendremos en cuenta las dimensiones, temperaturas inicial y final ademas de si tenemos algún punto critico interno.
- Refrigeración en cuadros eléctricos.
- Refrigeración en paneles de control.
FAQ’s: Preguntas frecuentes sobre los tubos VORTEX y la refrigeración neumática
El tubo Vortex es una máquina térmica capaz de dividir una corriente de gas presurizada en dos corrientes independientes, que tendrán una temperatura más alta y más baja que la de entrada al dispositivo.
Usa un suministro común de aire comprimido como fuente de alimentación. Generan dos corrientes de aire, una caliente y otra fría, sin partes móviles, las temperaturas, los caudales y la refrigeración pueden ajustarse en una amplia variedad de rangos por medio de la válvula de control.
El aire comprimido, normalmente 80-100 PSIG (5.5 – 6.9 BAR), es expulsado indirectamente a través de un generador a la cámara de giro del vórtice. Hasta 1.000.000 RPM, esta corriente de aire gira hacia el extremo caliente donde parte se escapa por la válvula de control.
Los tubos Vortex Exair cuentan con las siguientes ventajas:
- No tienen partes móviles.
- Sin electricidad ni químicos.
- Tamaño pequeño y liviano.
- Bajo costo.
- Libre de mantenimiento.
- Aire frío instantáneo.
- Durable.
- Temperatura ajustable.
- Generadores intercambiables.
Existen tres tamaños diferentes de tubos Vortex EXAIR: pequeño, mediano y grande. Cada uno produce un número de rangos de flujo, determinados por una pequeña parte plástica interna llamada generador. Si se conocen los requerimientos de enfriamiento, flujo o temperatura es muy sencillo seleccionar un tubo Vortex. Para más información contacta con nuestro equipo de profesionales.
- Entender las fuentes de carga del cuadro eléctrico: es fundamental evaluar las fuentes de calor dentro del tablero, como relés, controladores lógicos, cables y fuentes de alimentación. La eficiente disipación del calor prolonga la vida útil de los equipos y previene posibles riesgos operativos.
- Prevención de la condensación: la humedad y temperatura ambiental pueden afectar significativamente el rendimiento de los componentes electrónicos. Identificar y controlar las fuentes de humedad es crucial para evitar problemas como la condensación, que podría causar corrosión y cortocircuitos dentro del tablero.
- Gestión de la Temperatura Interna: es vital mantener la temperatura dentro del tablero en rangos óptimos de funcionamiento. Exceder estos límites podría provocar fallas en los componentes. Se recomienda mantener la temperatura del gabinete por debajo de los 35°C para garantizar un rendimiento óptimo según las normativas. Utilizar controladores de temperatura confiables ayuda a mantener la estabilidad térmica y evitar problemas relacionados con la histéresis del controlador.
